Alarma en Quintana Roo: Más de 180 niñas han desaparecido en lo que va del año
Por Esto!
Alarma incidencia de desapariciones en Quintana Roo, a la fecha se lleva un conteo de 272 personas extraviadas menores de 18 años, de las que 180 son niñas. En el registro de desapariciones según el rango de edad, el 46% de los casos en la entidad y no localizadas a la fecha, se encuentran entre los 15 y 29 años de edad.
De los recursos asignados para el año pasado, menos del uno por ciento fue destinado a atender el tema de los desaparecidos
En el índice de mujeres desaparecidas y no localizadas, la balanza es negativa porque, en comparación al año 2022, se han duplicado. En Quintana Roo, el 30% oscila entre los 15 y 19 años de edad.
De acuerdo con el sondeo realizado por Red Lupa, hasta el mes de mayo del presente año, el municipio de Benito Juárez encabeza la lista, con un total de 494 desapariciones, seguido de Othón P. Blanco, con 281, mientras que el municipio de Solidaridad contabiliza 176 casos. Felipe Carrillo Puerto registra 30 casos, cerrando el sondeo con el municipio de Isla Mujeres, donde se tienen 23 ausencias, lo cual no deja de ser alarmante si se compara con la cantidad de habitantes en esta demarcación.
María Dolores Patrón Pat, de “Madres Buscadoras de Cancún”, y Romana Rivera, de “Verdad, Memoria y Justicia”, exigen la intervención de las autoridades para la destitución de la secretaria de Gobierno, María Cristina Torres Gómez, y también de María López Urbina, al asegurar que “les han quedado grandes” estos temas y el control de las dependencias dedicadas a este tipo de delitos.
Estas cifras son con base en el último estudio realizado municipio por municipio, específicamente en el tema de desapariciones a cargo de Red Lupa, siendo evidente que mientras estas cifras se actualizan, las alertas de desaparecidos continúan emitiéndose en todo el estado. Hasta ahora, en lo que va del mes se llevan contabilizadas 30 fichas de búsqueda activas por parte de la autoridad.
Diana Miramontes, fundadora del colectivo “Malinches Ingobernables”, hace el llamado a la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas para que se enfoquen en reforzar los protocolos de actuación con el fin de lograr que se realice la localización en vida de estas personas. Esto solo se logra iniciando la actividad temprana sin tener que esperar las 72 horas como marcaba antiguamente la ley.
Según el registro de su colectivo, se ha detectado que algunos de los desaparecidos son menores que, por problemas familiares, prefieren salir de sus hogares, siendo al final víctimas de células de trata de personas o explotación sexual, debido a lo vulnerables que son a esas edades. Algunos fueron “levantados”.
En los últimos días se han registrado cinco personas desaparecidas en la capital del estado. Entre estas hay cuatro hombres y una mujer, de 23 a 47 años, quienes fueron identificados como Yazmín Montilla Cárdenas (30), Orlando Carrillo Caberta (37), Pablo Reyes García (23), Ángel Manuel Mora Caberta (38) e Isidro Amador Castro Llanes (47).
Lo preocupante es que tres de los casos fueron “levantones”, incluso fueron llevados a cabo en los domicilios de las víctimas, ubicados en la colonia Fovissste Tercera Etapa; lo que se está convirtiendo en una situación más común que anteriormente se percibía con menor frecuencia, lo cual ha despertado el pánico entre los chetumaleños, sobre todo, los vecinos de los plagiados.
Respecto a la desaparición de Yazmín Montilla Cárdenas, se dio a conocer que representa el caso número 65 de mujeres desaparecidas en lo que va de este 2024; lamentablemente, muchas de las desaparecidas suelen ser víctimas de feminicidio, como ocurrió en el sonado caso de la joven enfermera Dulce. Sin embargo, las autoridades aún no han informado avances en su caso, por lo que aún se desconoce el móvil de su desaparición.
Se aseguró que el trabajo de las autoridades sigue siendo deficiente para la magnitud de esta problemática, independientemente de la naturaleza de las desapariciones, ya que no todas son ejecutadas por el crimen organizado; y a ello se agrega el hecho de que muchas familias no reportan los casos por temor a represalias, además de que tampoco acuden a manifestaciones para evitar problemas con las autoridades, como ocurrió en la última protesta.
JGH