Detonaciones de mina provocan derrumbe de cerro en Jiutepec y 40 familias se quedan sin casa
Isabel Vega / La izquierda diario
Los pobladores de la colonia Vista Hermosa en el municipio Jiutepec Morelos, reportaron desde el 19 de septiembre la formación de tres grietas, mismas que fueron provocadas por las detonaciones de dinamita de la empresa Triturados no Metálicos Jiutepec.
Además las y los pobladores exigieron el cese de actividades de dicha mina, pues el cerro Piedras Preciosas corría el riesgo de desgajarse poniendo en riesgo las viviendas y vidas de quienes ahí habitan, situación que finalmente ocurrió.
Doce casas y cuatro lotes fueron perdidos por el deslave del cerro, no se perdió ninguna vida pues los pobladores decidieron abandonar sus hogares por el peligro que corrían, sin embargo todas las pertenencias de dichas casas se perdieron por completo.
Tanto el alcalde de Jiutepec Rafael Ríos como el gobernador de Morelos Cuauhtémoc hicieron caso omiso a las peticiones de los pobladores en días pasados y recién cuando el daño estaba hecho ordenaron el cese de actividades de la mina de Trituradores no Metálicos, declararon también que habían detenido una mina de cal y arena un poco más alejada del poblado, sin embargo, reporteros de La Jornada declararon que esta seguía en funcionamiento.
Además, Rafael Reyes dijo que el detonante de la catástrofe no fueron únicamente las detonaciones en la mina, sino que las casas afectadas estaban ubicadas “en lugares en donde no se podían edificar viviendas” además de la instalación de toma de agua y drenaje. Sin embargo, los vecinos de Vista Hermosa llevan viviendo en esta zona más de 50 años y jamás se les notificó que fuera un asentamiento peligroso.
Las declaraciones de Rafael Reyes apuntan a restar responsabilidades a la empresa minera y al propio gobierno local y estatal, a la par de responsabilizar a las familias de Vista Hermosa por el deslave y la pérdida de sus hogares, pues un total de 40 casas tuvieron que ser evacuadas por el riesgo que aún permanece.
Hasta el momento no hay información sobre si serán reubicadas en viviendas dignas, mismas que deberían ser garantizadas por el gobierno y financiadas por la empresa Triturados no Metálicos, principal responsable.
Este caso remite a la derrumbe del cerro del Chiquihuite en Tlanepantla hace menos de un mes y no es casual, pues si bien las intensas lluvias facilitaron ambas situaciones, de fondo el problema es que la vivienda de las familias pobres y trabajadoras no es una prioridad para ningún gobierno, mientras el presupuesto para proyectos de extracción como el fracking sigue aumentando.