Colectivo acusa a la Guardia Nacional y al INM de uso excesivo de la fuerza contra migrantes
“Se siguen perpetrando operativos violentos que separan a las familias y acciones graves a violaciones a derechos humanos”, señaló la organización no gubernamental.
Isaín Mandujano/ PROCESO
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano denunció este jueves el uso excesivo de la fuerza pública por parte de integrantes de la Guardia Nacional (GN) y agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) para desmantelar la tercera caravana de migrantes que se había formado en menos de una semana.
En este incidente violento fueron agredidos –y se les impidió realizar su labor– los activistas de organizaciones civiles que conforman este Colectivo y los periodistas que pretendieron documentar este operativo policiaco en contra de personas migrantes y solicitantes de refugio.
El Colectivo dijo que los participantes de la tercera caravana de migrantes en menos de una semana fueron interceptados y agredidos en un acto de desproporcionada violencia y represión en San Felipe, Escuintla, Carretera Costera Tapachula – Tuxtla Gutiérrez.
El Colectivo explicó que en el operativo sorpresivo por parte de la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM), sin formación o cerco previo, las personas que caminaban se vieron obligadas a dispersarse a los alrededores para evitar la detención. Como en cada operativo, las primeras personas detenidas son las de perfil más vulnerable, mujeres, niñas y niños, quebrantando la seguridad y unidad de las familias, añadió.
Y que las personas fueron perseguidas por parte de la GN y el INM incluso dentro de la ciudad de Escuintla y caminos aledaños.
“Se siguen perpetrando operativos violentos que separan a las familias y acciones graves a violaciones a derechos humanos que agravan la situación de las personas que por meses se han enfrentado a un muro institucional que les obliga a usar estrategias que les ponen en más riesgo de la violencia institucional y al deterioro de sus condiciones físicas y de salud, en particular a mujeres embarazadas, niños, niñas y adolescentes que caminan en condiciones inhumanas”, dijo el Colectivo.
Indicó que la actuación violenta y desproporcionada hacia las personas tiene impactos físicos y emocionales visibles, como son expresiones de dolor, decepción y miedo. También dio paso a intentos de defenderse con lo que encontraron a la mano.
“Destacamos que a pesar de los actos de represión las personas siguen rearticulándose y autoconvocándose para continuar con su legítimo reclamo de buscar protección y una vida digna que son las mismas razones que les obligaron a salir de sus países de manera forzada”, dijo la red de organismos no gubernamentales defensores de derechos humanos de los migrantes.
Señalaron que de manera reiterada se ha solicitado al Mecanismo de Protección de Defensores y Periodistas de Segob para que garantice la seguridad de quienes acompañan documentando estos actos de violación a derechos humanos, sin obtener una respuesta oportuna.
Señalaron también que las condiciones generales exigen de respuestas humanitarias inmediatas para garantizar la integridad física de las mujeres, niñas niños, adolescentes y hombres que se movilizan, por lo que hicieron un llamado a las instancias y agencias correspondientes que permitan una respuesta que ya es urgente.
En este contexto exigieron frenar de inmediato a la violencia del Estado hacia los migrantes y dar seguridad plena a las personas migrantes y solicitantes de refugio que se movilizan, así como a activistas y periodistas.