“No queremos ser esclavizados en nuestras tierras“ denuncian a Sembrando Vida en Yucatán
Denuncian irregularidades en ejecución de Sembrando Vida
Sandra Gayou/Quadratín Yucatán
TIZIMÍN, Yuc., 14 de julio de 2020.- A unos días de que la titular de la Secretaría del Bienestar, María Luisa Albores anunciara que el programa Sembrando Vida operaría de la mano con el Tren Maya, campesinos afiliados de la comunidad de Dzonot Carretero en el municipio de Tizimín, denuncian irregularidades en su operación.
En entrevista con Quadratín, uno de los campesinos afiliados a Sembrando Vidas, habitante de dicha comunidad y quien pidió anonimato por temor a perder el beneficio del programa, aseguró que no se ha cumplido lo que les prometieron, como la entrega de herramientas para trabajar, así como insumos necesarios como el biogel.
El campesino aseguró que en Dzonot Carretero el programa Sembrando Vida tiene 58 afiliados, sin embargo, desde que arrancó su operación en el estado, ellos han tenido que solventar los gastos para la construcción de un vivero, en el que invirtieron 15 mil pesos, “ya se construyó la palapa, eso también entre los productores“.
Además invirtieron en la compra de la malla protectora, lo que representó una inversión de ocho mil pesos, aproximadamente, no saben si esos recursos se les van a regresar ya que dichas construcciones se les solicitaron como parte del programa.
Otra de las problemáticas a las que se están enfrentando, además de la carencia de herramientas e insumos, es la falta de espacio para almacenar las plantas que se han producido, pues asegura el entrevistado que el vivero tiene más de 50 mil plantas, cada productor tiene que entregar mil plantas.
Lo anterior como resultado de sembrar 500 plantas de forestales y 500 plantas de frutales, se siembra cedro, caoba, mango, caimito, tamarindo, zapote, achiote, ciricote, entre otras, una vez la superficie está sembrada y cosechada, no se sabe qué se hará con esas plantas: “en el vivero no hay condiciones, no sabemos si las vamos a vender, a regalar o qué cosa“.
Los becarios del programa, asegura, les obligan a estar los siete días a las semana en la parcela, durante largas jornadas, ya que pasan a supervisar que estén laborado cualquier día a cualquier hora, “no queremos ser esclavizados en nuestras tierras“, consideran que podrían encontrar la manera de realizar las supervisiones ya que si la parcela está trabajada “es lo importante“.
No están de acuerdo con la manera en la que se está ejecutando se sienten presionados por los becarios “de la comunidad que lo tienen monopolizado, son familiares, no ha habido convocatoria“ a pesar de que tienen conocimiento de que dos de ellos fueron dados de baja y aún no se sabe quién ocupará esos lugares.
Por otro lado consideran que en la actual contingencia sanitaria están siendo expuestos ya que se les convoca a reunirse a los 58 productores de manera cotidiana.
En la página web del Gobierno de México está plasmado que Sembrando Vida otorgará apoyo económico, en especie para la producción agroforestal (plantas, insumos, herramientas), así como “acompañamiento técnico para la implementación de sistemas agroforestales. Los técnicos del Programa trabajarán con los campesinos en un espíritu de compartir conocimientos y experiencias, aprendiendo de la sabiduría de las personas que han convivido con la naturaleza y especialmente con su territorio“.
Sin embargo, esto no está sucediendo de acuerdo con la declaración de los campesinos, quienes solicitan la intervención de las autoridades correspondientes pues esta problemática está poniendo en riesgo su permanencia en el programa.