La “exitosa” consulta del Tren Maya en la que votó el 2.86% del padrón electoral de la zona
Mathieu Tourliere/ PROCESO
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Pese que el gobierno federal presume su “ejercicio ciudadano” de consulta sobre el Tren Maya como un éxito, solo fue a votar el 2.86% de la población inscrita en el padrón electoral de los municipios donde se instalaron 268 mesas.
Según la Secretaría de Gobernación, en la votación de ayer se contabilizaron 100 mil 940 boletas en 84 municipios, cuyos padrones electorales suman 3 millones 526 mil personas, de acuerdo con una consulta en el portal del Instituto Nacional Electoral (INE), con cifras actualizadas al 13 de diciembre de 2019.
Es más: previo a la jornada de votación, el gobierno federal anunció que imprimiría y repartiría cerca de 800 mil boletas, lo cual significa que, ante el bajo interés ciudadano por la consulta, siete de cada diez boletas impresas no sirvieron para nada.
A lo largo de este lunes, Apro pidió a la oficina de prensa de la Secretaría de Gobernación (Segob) que le informara sobre el número exacto de boletas que fueron distribuidas para la consulta del Tren Maya; hasta la noche, no había obtenido respuesta.
En la conferencia matutina de Andrés Manuel López Obrador, la subsecretaria Diana Álvarez Maury presumió que la votación arrojó una amplia aprobación del megaproyecto, con 92.3% de boletas tachadas con el sí.
Sin embargo, las 93 mil 142 personas que acudieron a las urnas solo representan el 2.6% del padrón electoral de los 84 municipios donde se llevó a cabo la consulta.
Ayer, proceso.com.mx documentó que poca gente fue a votar en Palenque y Tenosique, dos municipios dónde el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) pretende construir estaciones y ciudades nuevas, y que prácticamente toda la gente que acudió a las mesas votó a favor.
En los municipios donde se podía votar, las autoridades pegaron mantas promocionales en las que aparecían los beneficios del Tren Maya e indicaban los lugares de las casillas.
Estas mantas, elaboradas por el Fonatur, el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y la Segob, prometían que la construcción de las vías y de obras urbanas generarían más de 400 mil empleos –directos e indirectos–, que el proyecto cuidará el medio ambiente y el patrimonio histórico de la región, y que llevará un “desarrollo equilibrado”.
También prometían que los pasajeros locales pagarán tarifas de “casi la mitad que los turistas”, sin precisar el monto, y que generaría 157 millones de pesos al día en 2023, año en que se planea su puesta en marcha.
Milardy Douglas Rogelio Jiménez Pons, director general del Fonatur y principal promotor del Tren Maya, se congratuló en la conferencia matutina de López Obrador que durante el “importante evento” del fin de semana se vio el “amplio apoyo que tiene este proyecto”.