Asesinan a activista de San Fernando, Tamaulipas
Esmeralda Román y Chantal Martínez/Milenio
La representante del colectivo de desaparecidos de San Fernando, Miriam Elizabeth Rodríguez Martínez, fue asesinada anoche por un comando que ingresó a su vivienda, informó el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca.
Rodríguez Martínez se convirtió en activista luego de que hace cinco años su hija Karen fuera secuestrada por un grupo delincuencial; en 2015 el cuerpo de la joven fue encontrado en una fosa clandestina.
Elizabeth Rodríguez participó en varias marchas apoyando la búsqueda de desaparecidos, así como en la caravana contra el miedo, realizada el mes pasado.
A través de su cuenta de Twitter, el gobernador condenó el ataque y mandó condolencias a los familiares de Elizabeth Rodríguez Martínez.
Expreso mi más enérgica condena por el cobarde asesinato de la activista Miriam Rodríguez Martínez. Mis condolencias para su familia.
— Fco. Cabeza de Vaca (@fgcabezadevaca) 11 de mayo de 2017
El dirigente del Colectivo de Familiares y Amigos de Desaparecidos, Guillermo Gutiérrez Riestra, denunció el asesinato de la activista Miriam E. Rodríguez Martínez, presidenta del Colectivo de San Fernando. A través de su cuenta de facebook desde temprana hora los colectivos repudiaron el crimen.
“Hace unas horas me enteré del cobarde asesinato de la compañera Miriam Elisabeth Rodríguez Martínez, dirigente del colectivo de desaparecidos, en el municipio de San Fernando Tamaulipas un grupo de la delincuencia, llegó en la noche del 10 de mayo a su casa y la ultimó”.
“Este hecho es parte de los asesinatos que por cierto han quedado impunes de defensores de derechos humanos en el país” denunció.
¿Pero quién era Miriam? Miriam era una señora prospera propietaria de un negocio, elegante que contrastaba con la dureza y firmeza en sus argumentos es decir no se andaba en las ramas, quien como muchos sufrió el secuestro de su hija, su coraje y gran tenacidad, sin apoyo alguno de las autoridades, logró detener a los secuestradores de su hija y ella misma los entregó a las autoridades, se la pasaba a diario en los juzgados para impedir que salieran de la cárcel, también con sus propias investigaciones logró encontrar los restos de su hija”, escribió Gutiérrez Riestra.
JERR