Despojan a 20 locatarios de espacios y mercancía
Rocío González Alvarado, Mirna Servín Vega y Ángel Bolaños Sánchez
Junto con granaderos, autoridades de Iztacalco realizan el desalojo de madrugada
Tras enterarse de la apertura de sus puestos y el despojo de sus mercancías en el mercado Río Frío por autoridades de la delegación Iztacalco, los locatarios bloquearon la avenida Té y Sur 175 Foto Alfredo Domínguez
Con el apoyo de la fuerza pública, autoridades de la delegación Iztacalco desalojaron ayer por la madrugada a un grupo de locatarios del mercado Río Frío, que durante más de cuatro décadas ha sido conocido por la venta de chácharas en la calle Oriente 110, en la colonia Gabriel Ramos Millán.
La acción fue calificada por los afectados de “un despojo”, pues sin ninguna notificación trabajadores de la demarcación rodearon el mercado con granaderos, abrieron a golpes cerca de 20 locales y se llevaron la mercancía.
“Lo único que nos dicen es que quieren construir un pozo de agua, pero se planteó que se hiciera en un parque que está abandonado y lleno de drogadictos. Ya nos habían dicho que sí era viable esa propuesta, pero ahora llegaron a robarnos nuestras pertenencias y a quitarnos nuestra fuente de empleo”, denunció Ivone Mojica, quien tiene 30 años en este mercado.
De 96 años, Simón Enríquez, uno de los pocos fundadores que sobreviven, detalló que este terreno lo adquirieron por medio de una donación cuando Alfonso Corona del Rosal era jefe del Departamento del Distrito Federal. En pequeños locales hechos con láminas y piso de terracería comenzaron a vender chacharitas. “Nos costó mucho trabajo a mí y mis compañeros; aquí empezamos con la lluvia o el calor”, recordó.
En la actualidad, el mercado cuenta con 515 locales, donde también se venden todo tipo de artículos, refirió Rosa María Mancera, cuyo local no fue saqueado, pero se encuentra tapado por las tablas utilizadas para dividir los espacios desocupados.
Los afectados bloquearon durante algunas horas la avenida Té, lo que afectó el servicio del Metrobús, pero no fueron escuchados por las autoridades delegacionales, por lo que acudieron a la sede del gobierno capitalino.
Por la tarde, la diputada de Morena en la Asamblea Legislativa Citlalli Hernández Mora acusó a la delegación de pretender “sabotear” la negociación de los locatarios y vecinos de la colonia Gabriel Ramos Millán con el gobierno central respecto a la construcción del pozo, al haber realizado el desalojo el mismo día en que se tenía una reunión con el subsecretario Juan José García Ochoa y funcionarios del Sistema de Aguas de la Ciudad de México para dar información de dicho proyecto.
La legisladora dijo que los vecinos y los locatarios no se oponen a la construcción del pozo, puesto que la colonia requiere de mayor abasto de agua, pero no se les ha proporcionado la información suficiente y el director Jurídico y de Gobierno de la demarcación, Aurelio Alfredo Reyes, “ha mantenido una actitud prepotente diciéndoles que si él quisiera podría cerrar todo el mercado”.