Oxido de hierro de jales de Zimapán puede generar cáncer: especialista del IPN
Juan Ricardo Montoya
Zimapán,Hgo 11 de agosto .-Los oxidos de hierro que hay en los jales de minas de pueden provocar cáncer aunque no está totalmente demostrado dijo en entrevista Juan Francisco Olvera Rico, investigador y docente la Escuela Superior Ingeniería Química e industrias extractivas del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Por esa razón, Olvera Rico junto con un grupo de investigadores de la Escuela Superior Ingeniería Química e industrias extractivas del Instituto Politécnico Nacional (IPN) visitó la localidad de San Miguel, municipio de Zimapán para tomar muestras y realizar una exhaustiva investigación para determinar que tipo de elementos químicos y toxicidad hay en los polvos y escurrimientos rojizos provenientes de los jales colocados a escasos metros de la población por las empresas mineras El Espíritu, Preisan,Sago, San Antonio y La Purísima.
Aunque no está demostrado, si es oxido de fierro; el cáncer por ejemplo se produce por la oxidación de las células por lo que puede haber una afectación”dijo el especialista del Politécnico.
Subrayó que “con precisión no se sabe, no hay un estudio que determine con precisión qué es lo que genera el cáncer; lo que si es cierto es que el cáncer es una alteración de las células del organismo y potencialmente el oxido de hierro lo puede ocasionar dependiendo de cada persona y de la concentración de la sustancia”.
Sin embargo, explicó que en los jales podría haber otro tipo de elementos altamente peligrosos como el cianuro, arsénico y algunos minerales que si podrían poner en peligro la salud de los habitantes de San Miguel.
“No estamos diciendo que en los jales haya este tipo de sustancias; primero debemos hacer un exhaustivo estudio que llevará de tres a seis meses como mínimo para determinar que tipo y cantidades de elementos químicos hay en los montículos para con esta información acudir con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para que esa dependencia elabore planes de acción y coordine trabajos con las empresas mineras para bajar los niveles de contaminación”.
Lamentó que en San Miguel y otras localidades de Zimapán a diferencia de como ocurre en poblados de Estados Unidos, Canadá y Europa las empresas que explotan recursos naturales ocasionando afectaciones no aporten ni un solo centavo para resarcir o compensar los daños.
“En esos países los lugares donde hay mineras o petroleras es palpable el progreso económico tanto de la gente como de la infraestructura urbana , porque esas empresas son obligadas a aportar un porcentaje de sus cuantiosas ganancias en esos rubros; aquí en Zimapán esto no es palpable; en Canadá las empresas informan periódicamente sobre los montos de los recursos económicos que obtienen a las poblaciones afectadas y se les aplica el cumplimiento de un rubro que se denomina “responsabilidad social”.
La “Responsabilidad Social” en Canadá agregó Olvera consiste en la construcción de calles, carreteras, escuelas con infraestructura de calidad, clínicas de salud perfectamente equipadas y hasta hospitales de buen nivel pagadas y financiadas por las empresas en forma de compensación a los pobladores afectados.
“Eso en Zimapán simplemente no se da; aquí no ocurre eso por parte de las empresas mineras; no se ve que haya un trabajo hombro con hombro” remató Olvera Rico.
Los especialistas sostuvieron una reunión con vecinos de San Miguel y activistas de la agrupación Comunidades Unidas de Zimapán (CUZ) quienes dieron testimonios de las afectaciones que han sufrido en su salud, economía y otros rubros por la colocación indiscriminada de jales en el poblado, algunos de los cuales ya son del tamaño de enormes montañas cobrizas.
Luego, junto con los pobladores de San Miguel recorrieron el lugar para tomar fotos, recoger muestras del agua contaminada de un rio presuntamente contaminado por un jal colocado en una de sus orillas así como de los escurrimientos que hay en algunos de los cerros de desechos mineros.
Durante el recorrido se desató una pertinaz lluvia, lo que dio oportunidad para que los especialistas videograbaran y tomaran fotografías de como de algunos de los jales brotaban .