Tren Maya: más muertes de animales y la destrucción del hábitat de tortugas
Miguel Ángel Teposteco Rodríguez / EMEEQUIS
EMEEQUIS.- El Tren Maya partió la selva en torno a varios kilómetros. ¿Y quiénes fueron las víctimas? La lógica dice que los animales. Porque ellos son los que habitaban los espacios por donde pasa esta mega obra, insignia del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Hace un año, EMEEQUIS publicó el seguimiento sobre los animales afectados por la construcción de este transporte que, a meses de su inauguración, ha presentado desde desplomes hasta descarrilamientos. En la primera búsqueda que se realizó por parte de esta casa editorial, se arrojó la muerte confirmada de boas, iguanas y serpientes que vivían en lugares donde se realizaron trabajos arqueológicos para el Tren Maya.
En ese momento, un arqueólogo que trabajó en la obra explicó que en el caso de una iguana y una boa, fueron asesinadas accidentalmente con hachas y una motosierra, pues los animales se encontraban en los árboles en una de las zonas de tala.
“En la Cochera, Cancún, debido a las actividades de tala, sí se llegaron a matar accidentalmente a iguanas que estaban en los árboles”, dijo en ese momento.
Poco después, EMEEQUIS realizó varias solicitudes de transparencia para buscar aclarar cuántos ejemplares habían sido afectados por los trabajos del Tren Maya. El FONATUR (Fondo Nacional de Fomento al Turismo) y otras instituciones relacionadas mandaron documentos sobre el impacto ambiental de las obras, pero no la cantidad de animales afectados. Algo que contradecía los propios informes emitidos por las propias autoridades de la obra, que admitían, por ejemplo, sobre la muerte de una tortuga en la zona debido a las actividades de liberación de vía para el tren.
Y es que las máquinas “desmontaron y despalmaron” 3 kilómetros de derecho de vía. Y ahí, los expertos se dieron cuenta que la destrucción cobró una vida, pues se observó “en el derecho de vía una tortuga muerta en el trazo por lo que se da aviso a la empresa encargada del rescate para que incremente el esfuerzo y lo anoten en bitácora”.
También se consultó el área de comunicación del Tren Maya, pero hubo respuestas esquivas sobre las víctimas animales: se insistió en revisar mejor los informes que el presidente presentó durante su mañanera. Este secretismo también existe en los documentos gubernamentales consultados por EMEEQUIS que se encuentran en transparencia, en especial informes sobre despalme y tala en zonas donde se encuentran animales de muchas especies.
Sin embargo, algo cambió con el virtual término de las obras del Tren Maya, ya que a través de transparencia se admitió la muerte de animales. En varias solicitudes de transparencia respondidas por la Secretaría de la Defensa Nacional, se dieron los siguientes números, sin dar más detalles sobre las características de los animales.
Las muertes, ocurridas entre enero y abril de 2024, corresponden a 17 animales: 12 ovinos, 2 caninos y 3 bovinos. Estos murieron en lugares como Edzná, Campeche; Mérida, Yucatán; y Tenosique, Tabasco.
Estos números, sin muchos detalles de las víctimas, son parte de la poca transparencia del gobierno sobre las muertes de animales. A través de la revisión de decenas de documentos correspondientes al Tren Maya (sobre todo de la Sedena y del Fonatur), EMEEQUIS también encontró irregularidades en el reporte de animales, y sobre todo, irónicas referencias a los activistas que han protestado por las afectaciones de la obra en zonas naturales.
Por ejemplo, en un documento emitido por la Secretaría de Medio Ambiente, se menciona que en un despalme de 7 kilómetros sólo hubo la necesidad de rescatar “3 TARÁNTULAS, 2 TORTUGAS Y 5 LAGARTIJAS ANOLIS”.
¿No son pocos ejemplares de fauna para una extensión tan amplia de territorio?
No se mencionan las especies de las tortugas, lo que sería un dato importante porque puede haber ejemplares que estén en peligro de extinción. Este acompañamiento de la Secretaría de Medio Ambiente se realizó en Playa del Carmen y Puerto Morelos, en el tramo 5 del Tren Maya.
Este tipo de casos se repite durante varios informes en los que no se adjunta evidencia fotográfica de las actividades que pueda corroborar que no hayan ejemplares afectados por el movimiento de las máquinas y los trabajadores. Tampoco hay informes sobre nidos, madrigueras u otros refugios naturales afectados por la obra.
En otro de los informes, por ejemplo, se le avisa con puntualidad a las autoridades la no presencia de activistas por los derechos de la selva: “NO HAY INCIDENCIAS COMO LA LLEGADA DE AMBIENTALISTAS A LA ZONA NI EL PARO DE OBRAS POR ELLOS”. Es decir, que el activismo logró volverse un asunto cotidiano en las obras del Tren Maya.
DESTRUCCIÓN DEL HÁBITAT DE TORTUGAS
En uno de los informes, emitido el 24 de octubre de 2022, se narra el despalme y tala de una zona en donde se encontraba un amplio número de tortugas. Es decir, un hábitat entero de charcas donde estos animales vivían en paz.
Según el documento emitido por la Secretaría de Medio Ambiente, la destrucción de este hábitat se realizó de la siguiente manera:
“Se aplanaron aproximadamente 1,000 metros de caminos de acceso desde el tramo de Puerto Morelos al Aeropuerto sobre el derecho de vía. El desmonte del banco de materiales del frente (Lausana) cuenta con 8.3 hectáreas de desmonte de 20 que se pretende desmontar de las 40 hectáreas del banco”.
“La fauna rescatada comprendió 34 tortugas de diversas especies debido a que éstas se encuentran en las charcas de la zona”.
Una vez más, no se mencionan las especies afectadas y no se detalla si la zona representaba un ecosistema establecido para ellas.
EMEEQUIS cuestionó a la Secretaría de Medio Ambiente para saber su postura sobre este acontecimiento. A la fecha no se ha recibido respuesta.