Autoridades y traidores están dañando el bosque otomí de Santiago Tilapa, denuncia la comunidad.
José Dueñas
Los quejosos afirman que los empresarios mineros han devastado hermosos paisajes en contubernio con empresas carreteras que operan en la región a nombre del progreso; “con ello el hábitat de plantas y animales de nuestro milenario Cerro Cuate, que durante siglos fue orgullo de nuestros abuelos otomíes, se encuentra a punto de desaparecer”.
“En esta región es delito y se encarcela a la persona que recoja leña para sobrevivir a causa de Delitos Contra el Ambiente, mientas que grandes autopistas, nuevas zonas habitacionales, donde se derriban miles de árboles y se destruye el ecosistema de nuestros pueblos originarios, son acciones aplaudidas por los gobernantes como Símbolo de Modernidad y Progreso”, reprochan los indígenas.
Reprocharon que sin ser consultados, en Santiago Tilapa, “algunos cuantos, por intereses económicos y políticos, con total cinismo y prepotencia dicen que pueden y tienen la autoridad para decidir por todos”.
“Con todo esto se violan nuestros derechos contenidos en la Carta Magna y Tratados Internacionales como el Convenio 169 de la OIT, como el derecho de OBTENER NUESTRO CONSENTIMIENTO LIBRE, PREVIO E INFORMADO para realizar obras como minas o carreteras en nuestra comunidad y bosques. El canto del jilguero y el cenzontle en nuestros sagrados cerros pueden extinguirse para siempre; es tiempo de reflexionar: La naturaleza no pertenece al hombre, El hombre pertenece a la naturaleza”, finaliza la denuncia de los indígenas.