La reforma en Veracruz, primer paso para criminalizar el aborto en todo el país, alertan ong
Xalapa, Veracruz, 13 de mayo.- Con la eventual aprobación de la reforma al artículo cuarto de la Constitución del estado de Veracruz, pospuesta el jueves de esta semana, aumentarán las muertes por aborto, y se corre el riesgo de que la “protección a la vida desde la concepción” sea ley nacional, alertaron activistas y defensoras de los derechos humanos de las mujeres.
Consideraron que la reforma, cuya discusión fue aplazada ayer en el Congreso local —luego de ser aprobada en primera instancia en enero pasado—, no sólo contraviene tratados internacionales y sus implicaciones, sino que se convierte en un problema de salud pública por la vulnerabilidad en la que deja a las mujeres que requieran practicarse un aborto.
Al respecto, la médica especialista en sexología educativa e integrante del Pacto Nacional por los Derechos de las Mujeres, Ana Irene Muro Lagunes, advirtió que en los países en los que está penalizado el aborto mueren alrededor de 330 por ciento más de mujeres que deciden interrumpir sus embarazos, que en los países en donde está despenalizado.
“Los problemas de salud pública con la penalización del aborto se agravan enormemente, no resuelven los problemas de salud, sino que aumentan la muerte de mujeres”, insistió.
Por su parte, María del Montserrat Díaz, integrante del Colectivo Feminista de Xalapa, aseguró que se corre el riesgo de que se promueva a nivel nacional una ley que está en contra de los derechos humanos de las mexicanas.
Lo anterior, porque de aprobarse la iniciativa presentada en enero de 2015 por el gobernador Javier Duarte y aprobada en enro de este año, Veracruz sería el estado número 17 que en su Constitución local “protege la vida desde la concepción”, lo que podría impulsar esta ley a nivel federal.
Doble moral
La integrante de Salud y Género Olivia Aguilar Dorantes abordó el juego de poder que se mantiene entre el Estado y la Iglesia en el contexto de un proceso electoral en la entidad.
Dijo que las autoridades han permitido que haya intromisión de la Iglesia en una decisión en la que no tendría por qué intervenir, pues la reforma constitucional vulnera los derechos humanos de las mujeres al abrir la posibilidad de que se consideren ilegales las causales de aborto, como en el caso de violación sexual, malformación del feto o peligro para la vida de la madre.
Además, expuso, la intromisión de la Iglesia católica vulnera el Estado laico y expone una doble moral, ya que se habla de defender la vida desde el momento de la concepción pero no hay otras acciones que protejan la vida de las mujeres, como el acceso a educación y salud.
Agregó que la reforma criminaliza a las mujeres porque impone máximas sanciones, como la cárcel, como ocurre en otras entidades donde se han aprobado leyes similares que, además, no han resuelto el asunto de fondo: la legislación no hace que el aborto desaparezca, sino que la práctica se lleve a cabo en condiciones inseguras.
Aguilar Dorantes observó que esto también se debe entender en un contexto local en el que los partidos políticos y el gobierno estatal quieren quedar bien ante una parte del electorado.
“Estamos en un proceso electoral y esto responde al contexto en el que estamos, porque quieren ganar votos y los derechos humanos de las mujeres se vuelven un botín electoral, para ver de qué manera pueden aprovechar este tipo de reformas para tener una posición diferente ante el electorado”, precisó.
Más riesgos por muerte materna
Ante el riesgo de que se apruebe la iniciativa, la integrante del Consejo Consultivo del Instituto Veracruzano de las Mujeres (IVM), Estela Casados, advirtió que se dispararán los índices de mortalidad entre mujeres y habrá un aumento en la criminalización.
Y es que si la reforma se aprueba en segunda instancia, se podrían perder las causales de aborto legal —como violación, deformaciones congénitas o enfermedades que ponen en peligro la vida de la mujer— y quienes deban interrumpir su embarazo correrán el riesgo de ser encarceladas.
La situación es más grave aún dado que Veracruz ocupa el cuarto lugar a nivel nacional en muertes de mujeres por abortos mal practicados, por lo que temen que estos datos incrementen de aprobarse la reforma que protege la vida desde la concepción.
Violación de tratados
Las activistas consideraron que de aprobarse la iniciativa —la votación fue aplazada hasta julio próximo—, las autoridades estatales estarían violando el derecho internacional e ignorando los llamados contra esta reforma, de organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Está comprobado que penalizar el aborto y criminalizarlo no resuelve el problema de los embarazos no deseados, que son la causa de los abortos inducidos; lo único que produce es llevarlos a condiciones de inseguridad, expresó Muro Lagunes.