Denuncian médicos de Tabasco deficiencias en infraestructura hospitalaria
Armando Guzmán
VILLAHERMOSA, Tab. (proceso.com.mx).- Cientos de médicos y enfermeras del sector salud y clínicas privadas, así como políticos, maestros, empresarios y sociedad civil marcharon este domingo para exigir insumos, medicamentos y mejores condiciones de la infraestructura hospitalaria de la entidad.
La denominada “marcha de batas blancas”, arrancó del hospital Gustavo Rovirosa y concluyó en la Quinta Grijalva, residencia oficial del gobernador en turno, donde entregaron un pliego petitorio para mejorar el servicio de salud.
En mitin frente a la casa de gobierno, el oftalmólogo Guillermo Morelos dijo que el abogado y secretario de Salud, Juan Antonio Filigrana Castro, debe renunciar al cargo porque la salud en Tabasco no puede estar en manos de alguien “insensible” e “ignorante” de la medicina. Luego de ello, fue respaldado con gritos de “¡fuera!”, “¡fuera!” de los manifestantes.
El doctor Morelos y a la otorrinolaringóloga Micaela Saldaña, ambos del Hospital de Alta Especialidad Gustavo Rovirosa, tienen levantadas actas administrativas por permitir la introducción de cámaras de televisión a servicios de urgencias y denunciar la carencia de medicinas y deficiencias de equipo médico en hospitales y centros de salud de la entidad.
La doctora Saldaña reiteró que desde hace años viene repitiendo a sus pacientes que no hay tal o cual insumo, por lo que los médicos son los que reciben insultos de familiares de enfermos por falta de medicamentos y equipos, así como retraso en cirugías.
Insistieron que faltan medicamentos en los hospitales públicos, pese a que el secretario de Salud, Juan Filigrana, presume que las bodegas de la institución están repletas.
Equipos médicos que no funcionan, monitores que no sirven y carencia de insumos que retrasan cirugías, entre otras deficiencias, fueron enumeradas durante la protesta y en el documento que los doctores entregaron en la casa de gobierno.
El pasado 2 de diciembre, durante su comparecencia ante los diputados por la glosa del III informe del gobernador Arturo Núñez, el secretario de Salud anunció “una gran limpia” en la dependencia porque, dijo, los que están fallando son algunos funcionarios y médicos “que no se han adaptado al gobierno del cambio verdadero”.
Denunció que hay funcionarios “desleales” y médicos que con dolo niegan medicamentos a los pacientes, y que para actuar de esa manera se escudan en que son sindicalizados.
“Habrá una gran limpia en la Secretaria de Salud porque Tabasco se lo merece”, anticipó y aseguró que más del 80 por ciento de los equipos médicos están funcionando correctamente.
Resaltó que se ha logrado que muchos empleados regresaran a sus puestos de trabajo y quienes se han negado fueron turnados ante la Secretaría de la Contraloría o Auditoría Superior de la Federación para que les sean fincadas responsabilidades.
Destacó, incluso, que hay quienes deben devolver hasta un millón de pesos por el tiempo y monto del salario que no laboraron.
En relación al abasto de medicinas, el funcionario informó que en el almacén central de la dependencia hay al menos el 84 y a veces el 90 por ciento de suministros, por encima de la Norma Oficial.
El gobernador Arturo Núñez por su lado, durante la inauguración del Centro Regional de Vacunología en el municipio de Emiliano Zapata, el viernes pasado, dijo que hospitales de especialidades de Tabasco enfrentan serios problemas de saturación porque, además de atender a pacientes del estado, también lo hace con otros de Campeche, Chiapas y Veracruz.
En la marcha de “batas blancas” participaron maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y políticos como el ex candidato del PAN a la gubernatura, Gerardo Priego Tapia, así como el representante del blanquiazul en la mesa del Pacto por Tabasco, Armando Padilla Herrera.
Cuestionados al respecto, los médicos respondieron que no se les podía impedir que participaran y rechazaron que la marcha tuviera tintes políticos para desestabilizar al sector salud.
También acudió el presidente de la Asociación de Clínicas y Hospitales Privados, Ramiro Guerrero, en calidad de “invitado” y en solidaridad con el gremio médico que, aseguró, siempre ha permanecido unido.
Además, el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de la entidad, Juan Carlos Calderón Alipi, quien dijo que aunque la marcha no tenía fines turísticos, su familia siempre ha estado ligado al gremio médico y que el gobernador Arturo Núñez debe escuchar las demandas de los manifestantes.