Marina amenaza a defensores de DD.HH. del Comité de Nuevo Laredo por denunciarlos y exhibir sus crímenes

Revolución Tres punto cero

(22 de octubre, 2015.Revolución TRESPUNTOCERO).- “Sé que puedo morir en cualquier momento, eso lo tengo presente siempre. Estoy consciente y por ello hago mi trabajo lo más documentado posible, para que sirva de pruebas y no intenten asegurar que existen delincuentes atrás de nosotros, que hay guerrillas atrás de nosotros, que solamente desprestigiarnos a las instituciones. Claro que sí hay un temor permanente a morir pero eso no va impedir que sigamos trabajando, porque las familias confían en nosotros, el Comité es el único al que pueden acudir, cuando se habla de tortura, ejecución extrajudicial y desapariciones, ellos no confían en la autoridad, no confían en los políticos”, afirma a Revolución TRESPUNTOCERO, el Presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, Raymundo Ramos Vázquez.

“Cuídese mucho licenciado porque la Marina trae gente de civil y pueden atentar en su contra, supuestamente porque su trabajo desprestigia a la institución y defiende a los delincuentes”, fue una de las varias advertencias que ha recibido Raymundo Ramos Vázquez. El 25 de agosto de 2013, cuando personal operativo de la Secretaria de Marina detuvo a un grupo de jóvenes y después de torturarlos uno de ellos fue subido a un helicóptero de la institución. Durante varios minutos estuvieron sobrevolando la colonia La Joya y después de pasar por encima de las oficinas del CDH Nuevo Laredo, el detenido alcanzó a escuchar a uno de los marinos que decía: “ahí está el pinche Raymundito, dile que también a él lo vamos a desaparecer”.

Familiares de estos jóvenes habían presentado una denuncia en las oficinas del Comité de Derechos Humanos por detención arbitraria, incomunicación y probable desaparición forzada, pero una vez liberados por los marinos se presentaron a solicitar que ya no se le diera trámite a la queja luego de haber sido amenazados de muerte e inmediatamente después le advirtieron a Presidente “que se cuidara de la Marina”.

El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo A.C es una Organización No Gubernamental fundada el 21 de agosto de 1997, con personal voluntario que se dedica a la defensa de los derechos humanos, ofreciendo a víctimas y familiares asesoría y defensa jurídica, acompañamiento, gestoría y representación ante instancias gubernamentales.

En Nuevo Laredo y en todo el territorio de Tamaulipas es el único Comité que se ha dedicado a denunciar públicamente a la Marina, al Ejército y a cuestionar la forma en que el gobierno actual y el anterior, junto a los secretarios de ambas dependencias, así como las policías, han actuado en contra de la población civil.

Este organismo acude tanto a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), como a los altos mandos del Ejército y la Marina para que ‘controlen a su personal’, al mismo tiempo han dado a conocer a la luz pública, un sinnúmero de casos, a los que Revolución TRESPUNTOCERO les ha dado seguimiento, lo que ha provocado que las fuerzas armadas sean presentadas como los victimarios y nunca como los defensores.

“Si nosotros en Nuevo Laredo tenemos un panorama de extrema gravedad en cuanto violaciones a derechos humanos, hay que imaginar cómo está Reynosa Matamoros, Ciudad Victoria o Tampico, donde se ha estado cometiendo este mismo tipo de delitos pero no existen organizaciones civiles que los documenten. Por eso consideramos que las cifras que dan a conocer las autoridades, están demasiado maquilladas, porque es imposible ocultar que el alto grado de impunidad proviene de quienes están ejerciendo el verdadero poder en el país: la Marina y Ejército”.

Ejecuciones extrajudiciales, desaparición forzada y tortura, han sido los principales casos documentados y a los cuales se les ha dado acompañamiento, con denuncias directas a las Fuerzas Armadas, motivos que han valido a sus integrantes la persecución y el desprestigio constante. Siendo la Marina uno de los frecuentes detractores, han asegurado que tanto el presidente como el personal de la ONG, “esconde a personas que pertenecen al grupo de los Zetas” en sus oficinas.

También han padecido intento de allanamiento en las oficinas del Comité, sitiando los accesos y alrededores de éste, primero con la intención de revisar la documentación de la asociación, el tipo de quejas, los expedientes y el interior del edificio y posteriormente con la falsa acusación que el reclamo ante autoridades del gobierno de la República, organizaciones naciones e internacionales defensoras de los derechos humanos y medios de comunicación, ocasionaron la huida de un presunto delincuente que se ocultaba en casas contiguas y pretendían aprehenderlo.

En aquella ocasión el personal operativo de la Secretaría de Marina utilizó vehículos particulares y personales vestidos de civil, en un intento por crear confusión y deslindarse de su participación en los hechos.

Aunque Ramos Vázquez se encuentra inscrito en el Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, el desempeño del organismo ha sido deficiente, ha decir por el defensor.

“Cada vez que recibimos quejas nos ponemos en riesgo, somos vulnerables porque estamos teniendo una reacción inmediata en contra de las acciones del Ejército y la Marina; falsas acusaciones, intimidación, saqueo de oficinas, amenazas de muerte y detenciones arbitrarias, han sido el resultado de nuestro trabajo, lo cual es parte de la misma impunidad con la que han estado actuando cuando menos en los últimos dos sexenios, las fuerzas armadas.

Los ataques no tiene nada que ver con partidos políticos, porque la misma impunidad que gozaron con Felipe Calderón, la están disfrutando hoy con Enrique peña Nieto las fuerzas de seguridad. Actualmente vivimos una situación de acoso y persecución. Las medidas de protección que está ofreciendo el mecanismo ni son suficientes, ni son las mejores y mucho menos son adecuadas para la protección y seguridad, es por ello que trabajamos con organizaciones internacionales para que sean ellos quienes exigen al gobierno mexicano la protección y respeto al trabajo que estamos realizando”, explica a Revolución TRESPUNTOCERO, Ramos Vázquez.

Él explica que de no existir abusos constantes de parte del Ejército y la Marina, y si los soldados, marinos y policías federales actuarán con conocimiento de la ley, las denuncias que ha realizado el Comité no los desprestigiarían, porque no habría tal impunidad, “nosotros no los forzamos a que cometan delitos, ellos los hacen abiertamente porque saben que los van a proteger sus superiores, que los van a proteger las instituciones del poder político, empezando por la presidencia de la República” advierte Ramos.

En cuanto al trabajo de defensa y acompañamiento de las víctimas, de Tamaulipas, asegura que se tienen que enfrentar a Ministerios públicos insensibles, parciales, lentos, deficientes y sin apego a la ley General de víctimas. Por el lado de la investigación, en cuanto al desempeño de la autoridad ya sea estatal o federal, existen constantes represalias hacia las familias de las víctimas y a sus defensores, que pueden ser allanamientos, amenazas, campañas de desprestigio, “porque son muy buenos para eso”, en las redes sociales, en las páginas que ellos llaman de ‘seguridad’, realizan constantes acusaciones hacia los activistas. En cuanto al Comité que él preside, asegura que ha habido distintas denuncias, hechas por delincuentes, quienes han sido pagados y prometido impunidad de afectarlos en su integridad física y moral.

A lo anterior se le suma el papel de la sociedad, la cual es pasiva y también mantiene un temor arraigado hacía las Fuerzas Armadas, “porque todavía está presente lo que ocurrió en Tlatelolco, cuando de ser víctimas, los estudiantes, maestros y trabajadores, el Ejército y el gobierno federal los convirtió en delincuentes; en ese tiempo implementaron una ola de terror que terminó por paralizada a la población siendo éste un reflejo de lo que hoy vivimos nuevamente, a 47 años de aquel suceso. Esta sociedad no quiere actuar hasta que no es víctima, hasta que no la desaparecen, hasta que no la matan, hasta que no la allanan, hasta ese momento, esta sociedad no actúa, prefiere cerrar los ojos, los oídos y la boca”, puntualiza Ramos Vázquez.

Sin embargo, es preciso mencionar que existen casos donde existen testimonios de los testigos, pruebas de las acciones de los elementos y los mandos, testimonios de los elementos de Fuerzas Armadas, toda la investigación concluida y no se puede consignar la averiguación, “eso es cuando pruebas, cuando no hay elementos de pruebas, no le queda nada la sociedad, muchas veces de ahí viene la decisión de desistirse, porque no hay justicia México, y también se lucha contra la amenaza y la presión que suelen ejercer las autoridades hacia las víctimas, familiares y testigos.

Sin embargo, nosotros seguimos insistiendo, porque lo único que nos queda es que estos delitos graves no prescriben y consideramos que si se da un verdadero cambio político en México, este tipo de casos se pueden reabrir en cualquier momento y pueden todavía aspirar a tener justicia. Por eso vale la pena continuar, aún con las frecuentes amenazas y la posibilidad de perder la vida”, puntualiza Ramos Vázquez.

En muchas ocasiones en Comité de Derechos Humanos ha solicitado la intervención del gobierno federal, debido al constante acoso y hostigamiento a sus miembros, pero este a hecho caso omiso y el Mecanismo nuevamente ha fallado en su misión, por el contrario, organizaciones internacionales defensoras de los derechos humanos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch han respondido inmediatamente con un llamado solidario, dirigiendo escritos a la Presidencia de la República y a la Secretaría de Gobernación para exigir un cese a las hostilidades por parte de la Secretaria de Marina, aunque es poco probable que este tipo de violencia cese.

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