Reacciona la Fiscalía de Atención a Periodistas ante agresiones al gremio periodístico de Hidalgo
La fiscalía especial para la atención a delitos cometidos contra la libertad de expresión y periodistas que encabeza Héctor Zárate Durón deploró las agresiones cometidas en contra de los periodistas que el pasado viernes 18 de septiembre que fueron agredidos por elementos policiacos mientras realizaban su trabajo al hacer la cobertura de un hecho noticioso.
Al mismo tiempo, también de quienes fueron atacados a través de las redes sociales en la zona de Tula por publicaciones referentes a otro accidente donde acusan a los comunicadores de presuntamente revelar datos protegidos por la ley, lo cual, se advierte en las publicaciones, no fue así.
A través de publicaciones realizadas por diversos medios de comunicación, fotoperiodistas y periodistas señalaron que la noche del viernes acudieron a la avenida Revolución para cubrir un accidente vial, en el lugar ya se encontraban los uniformados y habían acordonado el lugar, por lo que empezaron a realizar su trabajo respetando el perímetro bloqueado, acción que trataron de impedirles.
Con agresividad fueron amedrentados periodistas y fotoperiodistas, acción que la fiscalía de atención a periodistas reprobó por completo, pues los uniformados no actuaron correctamente al impedir que representantes de los medios de comunicación realizaran su trabajo a pesar de que se situaron detrás del acordonamiento.
Zárate Durón conminó a policías, servidoras y servidores públicos a respetar el trabajo de las y los periodistas y fotoperiodistas, quienes sólo ejercen sus derechos a la libertad de expresión y libre tránsito. Derechos que, recordó, “nadie debe coartarles”.
Informó que “la instrucción del procurador Alejandro Straffon Ortiz es la de actuar de manera inmediata ante cualquier agresión cometida en contra de compañeros y compañeras periodistas, ya sea en el campo de la convivencia diaria o a través de acciones intimidatorias en las redes sociales”.
Explicó que “aunque en delitos considerados como no graves la ley nos ordena actuar bajo la querella (queja) del afectado, el procurador nos ha indicado estar pendientes de clauquier hecho de agresión o impedimento en el trabajo de quienes ejercen el periodismo”.
Recordó también que “es reporchable que quienes bajo el amparo del anonimato o de la lejanía de las redes sociales agreden a periodistas que informan hechos notoriamente públicos” como ocurrió con periodistas en Tula.
Empero, señaló, “cuando una o un periodista o fotorreportero rebasan la zona protegida para preservar las pruebas en un accidente o escena de un crimen incurre en faltas y contamina evidencias, por lo que ambas partes deben procurar hacer su trabajo en el marco del respeto hacia la ley”.
De la misma forma, se puso a disposición de las personas agredidas para que, de desearlo, inicien un acta circunstanciada y dejar un antecedente de la agresión de la que fueron víctimas en contra de los servidores públicos, para que procedan las sanciones que la ley establece en estos casos.