Sener: oaxaqueños aprobaron parque eólico; se viola amparo: pueblos indios

Miriam Posada García, Oaxaca

Miércoles 5 de agosto de 2015, p. 27
La Secretaría de Energía (Sener) informó que la comunidad indígena zapoteca de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, otorgó su consentimiento para la construcción y operación del proyecto de generación de energía eólica, que tendrá un costo estimado de 14 mil 454 millones de pesos, una capacidad total de 396 megavatios y una producción estimada de mil 310 GWh.

Energía Eólica del Sur, a cargo del megaproyecto, es una empresa que se creó en 2013, sobre lo que fue Mareña Renovables. Se trata de una coinversión australiana y japonesa.

En 2011 obtuvo un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo para la construcción del parque eólico La Venta, también en Oaxaca, para abastecer de energía, mediante 33 acuerdos, a Femsa y a la Cervecería Cuauhtémoc.

La Sener señaló que con la aprobación de la comunidad, obtenida el pasado 30 de julio, concluye el proceso de consulta previa, libre e informada, que durante ocho meses realizó junto con los gobiernos estatal y municipal, así como con más de 10 dependencias de los tres órdenes de gobierno integrantes del comité técnico asesor.

La dependencia insistió en que el proyecto cuenta con el consentimiento libre e informado de la comunidad indígena zapoteca de El Espinal, otorgado también luego de una consulta, por lo cual la construcción del nuevo proyecto se iniciará en breve.

El proyecto

El parque consiste en 132 aerogeneradores para lograr una capacidad total de 396 megavatios y una producción estimada en mil 310 GWh.

Tendrá un costo estimado de 14 mil 454 millones de pesos, lo cual representa una de las inversiones de la industria eólica en el estado más importantes en los últimos años.

Los procedimientos de consulta previa a las dos comunidades indígenas, que podían ser afectadas en sus derechos e intereses colectivos, fueron realizados por la Sener de conformidad con el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el artículo primero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el artículo 119 de la la Ley de la Industria Eléctrica, aseguró la dependencia.

Detalló que en la última fase de la consulta participaron más de mil 300 representantes de la comunidad indígena, quienes manifestaron su acuerdo con los beneficios asociados al proyecto y otorgaron su consentimiento libre e informado.

Entre los supuestos beneficios destaca la puesta en marcha de una estrategia de sustentabilidad energética en apoyo de la comunidad que promueva el uso de energías limpias y la eficiencia energética, mediante proyectos de corto, mediano y largo plazos.

De igual forma, compromisos y obligaciones adquiridos por la empresa, como el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, de todas las medidas de mitigación que salvaguarden el medio ambiente y los recursos naturales; la creación de un fideicomiso que destinará recursos para la reducción de la factura eléctrica doméstica de los usuarios de la tarifa 1C, habitantes del municipio de Juchitán de Zaragoza.

El gobierno federal destinará fondos para un proyecto de eficiencia energética en los servicios municipales y para la adquisición de un aerogenerador con tecnología mexicana operado por el Instituto de Investigaciones Eléctricas, que destine la energía generada al consumo de los usuarios residenciales de la tarifa 1C del municipio, mientras el gobierno estatal adquirirá un segundo aerogenerador, con el propósito de determinar las bases de un parque eólico municipal que pudiera crecer en el largo plazo en beneficio de la comunidad indígena

Matilde Pérez U.

Las asambleas Popular del Pueblo Juchiteco (APPJ) y de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (Apiidtt) sostuvieron que la asamblea en que se aprobó el proyecto de Eólica del Sur fue una farsa y viola el amparo que interpusieron en abril del año pasado contra el megaproyecto.

Carlos Sánchez Martínez, vocero de la APPJ, comentó que la consulta fue manipulada por las autoridades estatales y las secretarías de Energía (Sener) y de Gobernación, así como por líderes de la COCEI.

A la asamblea llegaron integrantes de los sindicatos que agredieron en la ciudad de Oaxaca al pintor Francisco Toledo. Antes de la reunión varios ejidatarios que se oponen al proyecto fueron amenazados vía telefónica y en la asamblea un grupo de sicarios los fue señalando. Sostenemos que los resultados de la consulta no son reales, abundó.

Ayer, la Sener informó que Eólica del Sur podrá iniciar la construcción de 132 aerogeneradores, que conforman el parque de generación, pues obtuvo la autorización de comunidades zapotecas de Juchitán de Zaragoza y El Espinar. Los 396 megavatios que se producirán en el megaparque serán enviados a Femsa y Heineken.

Sánchez Martínez comentó que la APPJ y la Apiidtt comenzarán una consulta popular indígena en las comunidades zapotecas de Santa María Xadani, Unión Hidalgo, Chicapa de Castro, La Venta, La ventosa, El Espinal y en el pueblo ikjoot Santa María del Mar. La comunidad agraria de Juchitán tiene 8 mil hectáreas que defenderá de las eólicas.

El 24 de abril del año pasado los opositores al megaproyecto presentaron una demanda de amparo ante el juzgado séptimo de Salina Cruz por violaciones a los derechos humanos y al proceso de consulta pública, porque no se respetó el artículo segundo de la Constitución ni el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). El amparo fue otorgado.

Sánchez Martínez comentó que el arribo de las empresas eólicas ha representado el aumento de las violaciones a los derechos humanos, agresiones y amenazas en contra de los luchadores sociales y de los ejidatarios que exigen respeto a sus derechos.

En el país hay 31 parques eólicos, de los cuales 21 se localizan en el Istmo de Tehuantepec, con mil 186 aerogeneradores de 78 metros de altura cada uno, ubicados en Juchitán, Unión Hidalgo, Santo Domingo Ingenio, Ixtaltepec y El Espinal.

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