Sin partidos políticos ni campañas, Cherán nombrará a sus autoridades
Cuatro años después de levantarse en contra de la destrucción de sus bosques, el narcotráfico y del edil priista Roberto Bautista Chapina, el pueblo indígena de Cherán nombrará el próximo 3 de mayo a las y los integrantes de su Concejo de Keris (mayores en lengua p’urhépecha).
Fuera de tiempos, formas y campañas del sistema de partidos políticos que predomina en México, Cherán reafirmará el gobierno de usos y costumbres que le fue ya reconocido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Además, este pueblo originario va a ir más allá de simplemente hacer un cambio de sus representantes; actualmente discute la manera de mejorar la estructura de su gobierno, los errores, los aciertos, las características de quienes deben ocupar un cargo dentro de la comunidad.
“Se llama nombramiento, no elecciones”: nos dicen integrantes de la Comisión de Enlace de Cherán, nombrados para reunirse con el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) y visitar las fogatas para informar sobre los acuerdos a los que se reúnen con esta entidad autónoma de gobierno.
A diferencia de las imposiciones de candidatos que ocurren a diario en los partidos políticos, Cherán plantea que los integrantes de la estructura de gobierno de usos y costumbres deben ser propuestos desde el nivel más básico de asamblea del pueblo, llamado “fogata”, y que recuerda cómo los indígenas se organizaron en barricadas el 15 de abril del 2011.
Luego, las propuestas de quienes integrarán el nuevo gobierno, deberán pasar al siguiente nivel compuesto por los cuatro barrios del pueblo: Kétsikua, Karhákua, Parhikutini y Jurhúkutini, para finalmente presentarse en la Asamblea General.
Radio Zapote y Másde131 fuimos invitados a una de estas reuniones de fogata en la iglesia del Calvario, justo el lugar donde comenzó “el movimiento”, como le llaman muchos habitantes al levantamiento del 2011. Las y los vecinos, con rebozos, chamarras, jorongos, comentan anécdotas: la captura de los integrantes del crimen organizado, el papel que tuvieron y siguen teniendo las mujeres.
Salvador Campanur, de la Comisión de Enlace, dijo a las y los asistentes a la fogata:
“Estas reuniones que estamos haciendo es para preguntarnos cómo es que miraron esta administración, cómo es que funcionó la estructura, cómo es que anduvieron cada uno de los concejos”.
¿La persona debe tener conocimiento de lo que significa usos y costumbres, debe saber el origen del movimiento de Cherán, debe conocer las tres exigencias: seguridad, justicia, reconstitución del territorio?, fueron algunas de las interrogantes que planteó Campanur.
“Vamos a prever que compañeros comuneros, que andan haciendo así como su campaña como para decir: Yo quiero ser Concejo Mayor, o de Bienes Comunales, o de Honor y Justicia, que es empezar a hacer como un proselitismo, una campaña, y esa campaña es la que no debe entrar”, dijo, citando a personas de otras fogatas y otros barrios.
“Debe ser cuando salga la propuesta en las pláticas que se tengan en cada una de las fogatas”, insistió.
Hubieron entonces breves comentarios a modo de evaluación sobre errores que tuvo el anterior gobierno comunal, si se cumplía con el tiempo, las responsabilidades, especialmente maestros y profesionistas que por su trabajo no pudieron atender las tareas que les encomendaba la comunidad: “queremos personas que trabajen para la comunidad tiempo completo”, decían. Y no que se les dé un salario, sino una compensación por su trabajo.
Se dijo igualmente que se iría pensando.
Y apagamos las cámaras, las grabadoras.
Precedente para otros pueblos
“Los partidos políticos son dedocráticos: tú y tú”.
“Los partidos: ellos dicen quién es quién. Ahí se autonombran. Con nosotros se trata de que no sean posiciones, sino ideas”.
“Desde que ya no están los partidos, estamos más tranquilos, no tenemos papeles por aquí, por allá. Estamos descansando. Nadie anda diciendo: Vota por mí”.
Tres frases que escuchamos de distintas personas en Cherán. Sin embargo, también comentan: “Los partidos políticos siguen operando”.
El 4 de noviembre del 2014 la revista web Cambio de Michoacán publicó una nota llamada “Cherán deberá enfrentar presiones partidistas para elección por urnas”, en la cual Elvia Higuera Pérez, Consejera del IEM, dijo que un grupo de 350 personas habían solicitado “regresar al sistema de partidos” argumentado su derecho al voto libre y secreto.
Cherán solicitó en el 2011 al IEM respeto y respaldo al nombramiento de sus autoridades por usos y costumbres. En ese entonces el instituto dijo no tener atribuciones.
El pueblo recurrió entonces a la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que decidió el dos de noviembre del 2011 cancelar las elecciones para ayuntamiento y en su lugar se dio una consulta que ratificó el sistema de usos y costumbres.
El 22 enero del 2012 se da la primera elección del Concejo de Kerys. En mayo de este 2014 la SCJN declaró procedente la Controversia Constitucional 32/2012 en contra de los poderes Legislativo y Ejecutivo de Michoacán por la reforma constitucional en materia indígena que habían aprobado en diciembre del 2011.
Los integrantes de la Comisión de Enlace de Cherán se han reunido periódicamente con el IEM. Después de la reunión que sostuvieron en el mes de enero, la comunidad realizó una entrevista con Elvia Higuera para sus medios de comunicación internos, el contenido fue proporcionado a Másde131.
En la entrevista volvió a recalcar que “un grupo de ciudadanos de Cherán” les hizo una petición por escrito para que el IEM acudiera al municipio para realizar una consulta. El IEM no se negó, pero dijo que en todo caso debía ser el Concejo de Kerys, previa realización de asambleas de fogatas y barrios, el que solicitara dicha consulta.
Las personas que realizaron esta petición, en la que de acuerdo con una nota de La Jornada de Michoacán publicada el 18 de enero, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) participa como tercer interesado, todavía mantienen un litigio ante la Sala Regional del Poder Judicial de la Federación en contra del IEM.
Actualmente el IEM y la comisión colaboran en el proceso de consulta, la emisión de la convocatoria, la instalación de mesas receptoras del sentir del pueblo y emitirá la declaración de validez de la elección.
“Es mucho más legítimo en cuanto que son decisiones que se toman de manera mucho más colectiva, y que además corresponde a un cansancio que hay en la ciudadanía en respecto a partidos políticos”, dijo Elvia Higuera en entrevista.
Especificó que además del municipio de Cherán y de la comunidad de Santa Cruz Tanaco no hay otros pueblos que hayan solicitado su cambio de autoridades (comisarios del orden o jefes de tenencia), mediante el sistema de usos y costumbres; sin embargo, prevén estar ante un panorama en el que más pueblos lo soliciten, siempre y cuando se haga la petición a través de una asamblea general.
Dijo incluso: “Por supuesto que el Instituto está para apoyarlos en ese sentido, porque hay un derecho reconocido”.
Y sin embargo, siguen pidiendo a la Comisión de Enlace de Cherán que nombre sólo a dos miembros de la comunidad, en vez de cuatro, uno por barrio. También discuten ante la Comisión si pueden “dar fe” o no de la elección y no sólo “validar”.
Mientras tanto, en Cherán nos siguen diciendo: “Los partidos políticos siguen operando. Dan tractores, láminas, material. Los priístas de siempre”.
Reconstitución integral de nuestros pueblos
“Por la reconstitución integral de nuestros pueblos” es la frase con la cual el Congreso Nacional Indígena (CNI) cierra sus comunicados.
También esa frase guía los actuales esfuerzos de Cherán, no sólo para darle vida de nuevo al bosque que fue devastado por talamontes, no sólo para recuperar su ronda comunitaria, también sirve para volver a hablar la lengua, para volver a cocinar el picoso atole de nurite, la turka: “pizza p’urhépecha”; para bailar y jugar como antes.
Sin haberlo planeado, aunque tal vez nuestros anfitriones sí lo hicieron, llegamos justo el día en el que se celebra la ceremonia de renovación del Ch’piri Jimba?i, el Fuego Nuevo.
Desde hace más de treinta años el Ch’piri Jimba?i reúne a diversas comunidades siempre en un pueblo distinto. Es como si se reconociera de nuevo el territorio. Esta vez van hacia Uricho.
Pero aquí, en Cherán, se hace un festejo propio con papeles maché de colores morado y azul, amarillo y verde; por la plaza desfilan niñas que recitan pirekuas, un canto tradicional p’urhépecha, a las cuales se les dan ayates y cestas como premio. Hay hombres de todas las edades que suben a zancos para recorrer la plaza.
“Era la única diversión que teníamos”, me cuenta un anciano: “todavía somos buenos en esto”.
Al día siguiente, día de la Candelaria, hay mesas frente al kiosco del pueblo. Maíces rojos, oscuros, amarillos, pinole, queso; de todo hay prueba. Delfina Velázquez Romero, detrás de sus cubetas de maíz, nos dice: “se bendicen las semillas, el día es para intercambiar lo producido en Cherán”.
“No se podía ya sembrar. Se quedaron parcelas sin sembrar, hizo falta el maíz. Un año antes habían dicho que ellos iban a cosechar nuestros productos”, revela.
“¿Los narcotraficantes?”, preguntamos.
“Sí, ellos”.
Y dice lo que hemos escuchado en muchas partes: “Ahora estamos bien porque cuando estaban los partidos políticos las familias ya ni se querían”.
Y también, dice lo que muchas personas nos ha dicho que hace falta: “Estamos pidiendo que nuestra comunidad progrese, que nos apoyen más, que tengamos trabajo, porque es lo que hace más falta, quisiéramos apoyo para que nuestros jóvenes sigan sembrando la tierra”.
Vamos a la parangua, que significa “donde se hace la lumbre”, un restaurante que sirve para dar trabajo a mujeres que son escogidas por barrio de manera rotativa, pasamos antes al vivero de semillas frondosas y naves repletas de pequeñas pinceladas verdes; aquí ocurre lo mismo, el trabajo se otorga de manera rotativa.
“En este vivero tenemos muchos pinitos que el día de mañana van a dar al monte”, dice Maricela Macías Guardián, trabajadora del vivero.
“Antes no había este tipo de trabajo. Cuando estaba el presidente (municipal) no había un vivero. No había empleo. A lo mejor hace falta más, pero ha mejorado”.
Señala hacia los cerros: “Estaba bien pelón, se veían los caminos de los carros. Ya se ha reforestado mucho. Este Consejo de Bienes Comunales invitó a escuelas a que fueran los niños a reforestar, para que conozcan”.
Uno ve hacia el monte, luego hacia el vivero, luego a las mujeres, los hombres que trabajan en el monte, y entiende la diferencia entre reconstruir y reconstituir. Ahora desayunan, comen tortillas calentadas en un anafre, mientras nos señalan el camino a seguir. Y vamos.
De vuelta de recorrer el cerro, pienso una frase que escuché en la ceremonia del Fuego Nuevo: “Al bosque no se le reconstruye, se le vuelve a dar vida”.
En algún momento de esa tarde, me senté en una banca para mirar hacia el kiosco mientras esperaba a mis compañeros. A mi lado izquierdo había dos hombres. Se desató una amistosa discusión entre ellos. Recuerdo especialmente dos ruidosas frases:
“Estamos pobres”.
“No vengas con chingaderas, estaremos pobres, pero ahora tenemos riqueza en el alma”, le contestó otro.
Esa noche, el techo, las láminas, el cielo; todo tronó, conjugado en un arrebato de fuerzas incomprensibles, como pocas veces había sentido.
El día que partimos de Cherán, los árboles seguían moviéndose de un lado a otro por la tormenta, vivos.