La Rectoría de la UADY no puede declarar obligatorias las clases extramuros
¿Tiene la APAUADY algo que decir sobre la huelga en la UADY?
La Rectoría no puede declarar obligatorias las clases extramuros porque contravienen al contrato colectivo UADY-APAUADY vigente, específicamente a la Cláusula 15: “Los horarios, materias, áreas, funciones y lugares de trabajo para los que hayan sido contratados los trabajadores académicos, no podrán ser alterados sin previo consentimiento del trabajador otorgado por escrito”.
Así, ni los maestros ni los estudiantes tienen por qué asistir a clases a ninguna sede fuera de la habitual mientras las instalaciones de la UADY permanezcan tomadas por los trabajadores administrativos y manuales sindicalizados en la AUTAMUADY.
Son tres, al menos, los temas que interesan a la comunidad universitaria, alumnado incluido: justicia salarial para trabajadores administrativos y manuales, quienes son universitarios; que se haga una auditoría federal a la Máxima Casa de Estudios para ver, por ejemplo, en qué partida están etiquetados los préstamos millonarios a los funcionarios de élite; cómo está eso de las familias más queridas, porque plagan Rectoría y al menos una Facultad.
Para hablar con claridad, he aquí las siglas:
UADY = Universidad Autónoma de Yucatán.
AUTAMUADY = Asociación Única de Trabajadores Administrativos y Manuales de la Universidad Autónoma de Yucatán “Felipe Carrillo Puerto”. Su secretaria general es Sofía del Socorro Ayil Sierra. La estructura de universitarios de este sindicato está integrada por 767 miembros de base y 210 de la bolsa de trabajo. La Asociación se declaró en huelga el 16 de enero.
APAUADY = Asociación del Personal Académico de la Universidad Autónoma de Yucatán. Hasta ayer, el secretario general era Carlos Fernando Aznar Denis, ayer mismo hubo asamblea electiva y se nombró a Carlos Zetina Moguel. A este sindicato pertenecen mil 800 universitarios. Se espera que hoy viernes la APAUADY haga una declaración para informar su cambio de directiva y defina su postura ante la huelga, si es que la tiene.
Ayer por la tarde había inquietud entre los académicos, incluso la declaración de uno de ellos a Libertad de Expresión Yucatán afirmando que la APAUADY se sumaba a la huelga, pero lo cierto es que hasta este momento (cinco de la mañana del viernes) el sindicato no se ha pronunciado. Sí lo han hecho integrantes de la comunidad de la APAUADY del campus de Arquitectura, Hábitat, Arte y Diseño de la UADY como se puede ver en el remitido publicado aquí. Lo mismo los académicos de la Facultad de Ciencias Antropológicas. Y antes, los de Veterinaria.
El Diario de Yucatán titula hoy viernes “Revés de estudiantes” y “Una negación parcial” lo siguiente:
“Los jueces federales de Yucatán negaron parcialmente los amparos que solicitaron estudiantes de las facultades de Derecho y de Contaduría y confirmaron, de momento, la continución de la huelga que realizan trabajadores administrativos y manuales de la Universidad Autónoma de Yucatán desde el viernes 16.”
“Erik Pérez Loyo, uno de los promotores de la lluvia de amparos (N. de la R. ¿lluvia de 12 amparos?) contra la huelga, informó que los jueces federales negaron la suspensión provisional del acto reclamado en los 12 amparos que tramitaron los estudiantes de la Facultad de Derecho de la UADY en los juzgados 1o., 2o., 3o. y 4o. de Distrito.
“La demanda de amparo de los estudiantes, explicó, fue por violación al derecho constitucional a la educación. Los alumnos solicitaron la apertura de las escuelas para tener clases en edificios que tienen lo adecuado.
“Sin embargo, los jueces federales negaron esa petición con el argumento de que la UADY habilitó sedes alternas para las actividades académicas, de tal modo que no hay violación alguna al derecho a la educación, sobre todo en el nivel medio superior, que es obligatorio, donde los alumnos asisten a clases”.
Más que revés de estudiantes es un revés a la Rectoría, que esperaba aplastar a los sindicalizados de la AUTAMUADY con la maniobra de los amparos estudiantiles.
También causó comprensible resquemor la difusión de los salarios desglosados del ex rector Alfredo Dájer Abimerhi y del incumbent José de Jesús Williams (sobre quien incluso corrió la voz de que no era mexicano. Corrección: su señora madre es hondureña pero él fue registrado en Mérida).
Dájer cobra 199,872.29. El rector Williams percibe 215,47371. Hoy cumple un mes en el cargo.
Por supuesto, el resentimiento de cada universitario va en correlación inversa a su salario. Esto es, a mayor salario, menor el sentimiento de agravio. Y viceversa. De ahí el interés acerca de si la nueva directiva de la APAUADY se solidariza con los administrativos y manuales, o de si apoya a la Rectoría, u opta por la abstención de posicionarse como sindicato.
Aparte, el Frente Estudiantil UADY ha apoyado a la AUTAMUADY en sus dos marchas: la del lunes (“Educación y Justicia”) y la del miércoles (“Marcha del Silencio”).
Por Esto! dice hoy viernes que Rectoría depositó ayer el dinero para el pago de los salarios del personal académico.
Quedamos a la espera de las declaraciones del nuevo Secretario General de la APAUADY.