Derrames de Pemex en la Laguna Mecoacán causan desastre económico

Armando Guzmán

VILLAHERMOSA, Tab.- Pescadores y ostricultores tabasqueños alistan cierre de carreteras contra Petróleos Mexicanos (Pemex) por haber “arruinado” la laguna Mecoacán con derrames de hidrocarburos.

Por la contaminación petrolera se suspendió la extracción y comercialización del ostión, de las que viven cientos de familias, y ha generado pérdidas millonarias a decenas de restaurantes del corredor turístico Puerto Ceiba-Bellote- Chiltepec del municipio de Paraíso, en la costa tabasqueña, donde se encuentra la Laguna Mecoacán. El pasado 26 de febrero, pescadores y ostricultores denunciaron que enormes manchas de hidrocarburos llegaban a la Laguna Mecoacán, provenientes de instalaciones y ductos que Pemex tiene mar adentro, en el Golfo de México.

Desde entonces, el presidente de la Federación de Sociedades Cooperativas y Organizaciones Pesqueras de la Chontalpa, Manuel de la Cruz Pérez, advirtió que la contaminación petrolera “arruinaría” los bancos de ostión que se cultivan en la laguna Mecoacán, del cual Tabasco es uno de los principales productores a escala nacional.

Dijo que los afectados serían unos dos mil pescadores, entre los de su federación, los llamados “libres” y los ostricultores.

El pasado jueves 5, el Subcomité Especial Estatal de Sanidad de Moluscos Bivalvos acordó suspender de manera temporal la extracción de ostión en la laguna, a fin de prevenir riesgos en la salud de la población que consume este producto y ante el inicio de la temporada de cuaresma.

Después de una serie de recorridos efectuados por personal de la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios de la Secretaría de Salud, se determinó que la Sagarpa no otorgue permisos para la extracción del molusco de los bancos ostrícolas.

La Secretaría de Marina vigila la zona para que se cumpla esta medida y las secretarías de Salud y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizan operativos de supervisión para impedir la venta y consumo del ostión provenientes de la laguna Mecoacán.

Restauranteros de la región, cuyo consumo de ostión es uno de sus principales platillos, expresaron su preocupación por esta decisión y se quejaron que desde que se suscitó el derrame de hidrocarburo han tenido pérdidas por más de tres millones de pesos por la caída de sus ventas.

Anticiparon que esto les obligará a despedir a unos 120 empleados como meseros y cocineros por el retiro del ostión del menú de platillos.

A su vez, pescadores y ostricultores anunciaron que, a partir del próximo lunes 9, bloquearán la carretera Puerto Ceiba-Santa Cruz que conduce a la laguna Mecoacán, porque la suspensión de la venta del molusco les traerá pérdidas y Pemex se negará a pagarles alguna remuneración.

Aclararon que sólo impedirán el paso a vehículos y maquinaria pesada de Pemex y compañías que laboran para la empresa, y no se moverán de ahí hasta que se les paguen daños.

Ante esta situación, el subsecretario de Pesca y Acuacultura de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal y Pesquero (Sedafop), José Francisco Iracheta, informó que se ofrecerán empleos temporales a los afectados, a través de la limpieza y remoción del hidrocarburo de la laguna Mecoacán.

Aseguró que quienes quedan “limitados en su economía” son las personas que viven a orillas de la laguna y los que trabajan en ella, no así los restaurantes o coctelerías de la ciudad de Paraíso porque el ostión lo pueden adquirir en el puerto de Sánchez Magallanes del municipio de Cárdenas.

El funcionario comentó que si bien existe impacto ecológico, la magnitud del derrame no significará mortandad del molusco bivalvo, y en caso que la hubiera, serán las autoridades correspondientes las que determinen las acciones a seguir.

http://www.proceso.com.mx/397785